El placer de hospedarse: ocho hoteles que nos enamoraron (y algunos no son caros)

En ocasiones viajar es una excusa para pasar un tiempo en un hotel especial y en este episodio traemos ocho espectaculares de ellos en todo el mundo. La nueva entrega de El Placer de Viajar presta atención a un aspecto fundamental de los viajes al que no siempre se da la importancia que tiene: los hoteles, que siempre son una parte importante de la experiencia viajera pero que en algunos casos puede ser esencial. Así es, por ejemplo, en el caso de los ocho hoteles en todo el mundo que nos recomiendan en esta ocasión Kelu Robles y Carmelo Jordá, muy distintos entre sí y capaces de convertir un viaje en algo muy especial e inolvidable. Hoteles muy diferentes como el Hotel Boutique Bosques, en las cercanías de las famosas Barrancas del Cobre mexicanas y que ofrece la posibilidad de vivir como un rarámuri, ya que es el único establecimiento hotelero atendido por miembros de la tribu indígena de la zona. Una experiencia muy distinta es la que ofrece el Grand Hotel Pupp, un hotel clásico lleno de historia y glamour en la ciudad balnearia checa de Karlovy Vary. Y si de glamour, historia y una ciudad bonita hablamos otro hotel inolvidable es el Dukes’ Palace de Brujas. La selección tiene también hoteles en España como el Palacio Carvajal Girón en la encantadora localidad de Plasencia, ubicado en un antiguo palacio restaurado con un gusto excelente y que se alza en el solar en el que estuvo la sinagoga de la ciudad. También en España, pero en este caso en una casa payesa de más de 200 años está el Can Curreu, uno de los hoteles más interesantes de Ibiza en el que, por ejemplo, las habitaciones tienen su propia azotea para contemplar el amanecer o las estrellas. No en España pero sí en nuestro país vecino está otra opción excelente, en este caso sobre todo para unas vacaciones familiares: el Martinhal Sagres Beach Family Resort, un hotel con unas villas espectaculares y en una zona llena de interés y muy poco explotada turísticamente del Algarve. Por último, el recorrido termina en dos hoteles españoles y, casualmente, navarros: la Hospedería del Monasterio de Leyre, en un rincón único, y la el hotel rural Heredad Beragu, en la pequeña localidad de Gallipienzo, que lleva el buen gusto de lo rural a una nueva dimensión. Escríbenos, explícanos qué te gusta más y si hay algo que no te gusta tanto de El Placer de Viajar, dinos de qué destinos quieres que hablemos y si quieres que tratemos algún tema y, por supuesto, pregúntanos lo que quieras en el correo del programa: [email protected].

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