Entre fantasías y proyectos

La imaginación es el sentido interno más básico porque su función es reproducir interiormente las sensaciones externas de los diversos sentidos (vista, oído, tacto, olfato, gusto), sumadas también otras percepciones que provienen de los demás sentidos internos (cogitativa, memoria y sentido común). Lo que distingue a la imagen (el producto de la imaginación) de la sensación (lo que captan los sentidos) es que la primera es irreal. La imagen no es la presentación, sino la representación de un objeto real, en ausencia de éste. Y así nuestra imaginación puede hacerse ideas, peligros, problemas... inexistentes. Pero también puede "crear" proyectos e ilusiones que hacen mover el alma. Lo interesante es utilizar para bien la imaginación y sabiendo cuándo me juega una mala pasada.

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