Mario Guerra

A lo mejor dices, yo no sirvo para el amor, a mí nadie me quiere, yo soy víctima de las circunstancias.

Y crea una nueva narrativa, vamos a decir, donde, a ver, ok, me pasó esto, pero ¿qué voy a hacer a continuación?

Trata de pensar en el siguiente capítulo y no te claves en los capítulos pasados.

Tres, reconecta con personas que habías descuidado.

Explora nuevas formas de relacionarte contigo.

Construye conexiones más auténticas y profundas.

Como digo, recupera amigos, haz nuevos amigos.

Apóyate en la familia.

Si la familia no es buen punto de apoyo, entonces trata de buscar personas que sí lo sean.

Vamos, rodeate del tipo de personas con las que quieres relacionarte y no solamente aquellas que te estén calentando más la cabeza con deseos, ideas de venganza, de revancha o sobándote las heridas para que te duelan más.

Entonces, por ahí no.

Y después, cada vez que tu mente vaya al por qué, rediríjela hacia el qué sigue.

¿Por qué?

No sé.

¿Qué sigue?

Lo que quiero hacer de aquí en adelante.

Es convertir cada momento de extrañar en una oportunidad de autoconocimiento y desarrollar nuevos intereses que siempre quisiste explorar.

100%.

Entonces lo digo y lo repito, si alguien desapareció sin avisar, como dije antes, no te obsesiones con la pregunta porque mejor responde y ahora, ¿qué sigue para mí?

Esa es la mejor pregunta porque no hay duelo más desgastante que el que nunca tuvo una despedida, pero también hay algo liberador en aprender a soltar.